lunes, 23 de noviembre de 2020

El fin de una era: Traducción Asistida

Decir que este año fue diferente a lo que todos esperábamos es quedarse corto. La pandemia afectó todos los ámbitos de nuestras vidas y, obviamente, el educativo no fue una excepción. Una de las materias en las que más se sintió (y por eso esperaba que para esta altura del año ya hubiéramos vuelto a clases presenciales) fue Traducción Asistida, y, al tener amigas que ya hicieron esta materia, sabía de antemano la importancia de tener clases en la universidad y con las herramientas de ese lugar. Aun así, se pudo cumplir con la cursada.

¿Qué me enseñó Traducción Asistida?

Al tener tanto contacto con la tecnología en nuestro trabajo, es imperativo conocer lo básico y dejar de llamar «coso» a lo que no sabemos qué es. Está bueno adentrarnos un poco más y entender cómo funciona todo, lo que al fin y al cabo va a implicar casi la totalidad de nuestras futuras vidas laborales. En lo personal, es mejor haberlo aprendido en una materia porque desconfío de mi capacidad para, algún día, decidir y forzarme a aprender todo esto.

Si bien seguramente en el futuro tenga que volver a repasar todo lo aprendido, me alegra terminar la cursada con información muy completa y de la mayor variedad posible. Algunos de los contenidos teóricos fueron los siguientes: conceptos informáticos básicos (hardware, software); Internet (World Wide Web y diferentes tipos de web: 1.0, 2.0 y 3.0; páginas web y sitios web; nube; hipervínculo); operadores booleanos; procesadores de texto (Word y Docs); traducción automática; corpus lingüísticos; localización e internacionalización; entre otros.


Además de aprender teoría, pudimos ponerla a prueba y aprender incluso más temas: utilización de herramientas de traducción asistida por ordenador/computadora (TAO), como Memsource, SDL Trados; traducción pública; diseño y utilización de memorias de traducción y bases terminológicas; subtitulado, entre otros.


Lo que no te mata…

Como ya mencioné en la introducción, la modalidad fue virtual (gracias, COVID -.-) y tuvo sus desafíos. Uno pensaría que la virtualidad haría todo un poco más fácil al estar en casa, pero no. No sé si fue eso o qué, pero se sintió más pesado, más estresante e incluso hubo con más lágrimas. Sin embargo, sobrevivimos (no pregunten cómo) y eso es lo que importa.

Traducción Asistida en práctica

La verdad es que esta materia te abre los ojos a cosas que no sabias que existían y que vienen como una bendición para ayudarte a sobrevivir las otras materias. Por ejemplo, en la materia de traducción, poder usar los operadores booleanos para agilizar y especificar las búsquedas de términos o de información fue muy útil (un camino de ida, 10/10 would recommend). Eso sí, ni hablar de cuando aprendimos a usar las herramientas TAO, ¡qué ganas de poder usarlas en los parciales!

Más cosillas interesantes

Algunos de los trabajos prácticos que tuvimos fueron muy interesantes. Mi favorito: subtitular. Me encanto el hecho de poder meter mano en algo que consumo mucho; estar del otro lado fue muy bueno. Me hubiera gustado hacer más, pero entiendo que había que variar en cuento a actividades.


Algunas otras, como hacer presupuestos o aprender a hacer tabulaciones, si bien no fueron las más divertidas, sí fueron de las más útiles.

Sin embargo, no solo los trabajos prácticos fueron variados, sino que los parciales también; fueron diferentes a como se hacen en las demás materias (Traducción Asistida imponiendo tendencia). En lo personal, el primero fue de mucha más adrenalina: con tiempo, respuestas concisas y teniendo que contar hasta las oraciones. Definitivamente una experiencia nueva. El segundo ya me agarró más preparada, aunque no por eso no tuve mis crisis (una cosa no cancela la otra). Si bien había podido practicar una parte, la otra fue más de improvisar porque no hubo forma de practicarla. Obvio que hicimos un trabajo un tiempo antes, pero, la verdad, entre tantas cosas era imposible acordarnos bien cómo se usaba el programa.

Otro comentario antes de cerrar este tema es que fue muy diferente a parciales de otras materias, y no hablo de contenido o forma de hacerlo. En esta materia se notaba todavía más el hecho de no estar en el salón, lo que, en consecuencia, te daba más la sensación de estar solo, experimentando con programas que solo usaste un par de veces. Mi preocupación más grande era: si explota algo, ¿qué hago? Puedo sonar exagerada, pero todo lo que aprendí de tecnología fue en estos meses.

Pensamientos finales

Los tiempos supieron volverme loca, no sé si fue por la modalidad de todas las materias o de este año (dudo que cuente decir de esta vida), pero me costó mantenerme al día. Lo hice los primeros meses, pero después hubo una caída que era sentarse a evaluar qué tarea era más importante y sacarla de ahí, ya no importaban las fechas de entrega. Puede que haya sido un problema mío, pero todos hacemos materias diferentes y teníamos fechas de entregas que se entrecruzaban. Solo sé que para estos últimos meses era cuestión de mantenerse a flote.

Sin embargo, me alegra aprender algo diferente y que sé que el día de mañana voy a seguir aplicando lo que aprendí. Traducción Asistida es una materia que te acerca más al mundo laboral y no hay nada como eso. Si bien hay quienes digan que falta mucho para recibirse (2 años para los que tienen suerte), hay muchos, como yo, que consideramos terminar con el título intermedio, lo que sería de acá a un año (de nuevo, si la suerte nos acompaña), y el tener esta materia a mitad de camino ayuda un montón.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

El fin de una era: Traducción Asistida

Decir que este año fue diferente a lo que todos esperábamos es quedarse corto. La pandemia afectó todos los ámbitos de nuestras vidas y, obv...